Wednesday, October 7, 2009

Respirar


No es la historia de una pérdida porque es una historia de amor. Sobre el peso de otro cuerpo en la sombra cuando una habitación se hace FINALMENTE respirable. Allí, aunque es pequeña, todo existe. Allí, la pared espejea el cuerpo. La cama tiene el cuerpo y todo el universo del cuarto lo repite. Nunca a su lado dormía sabiendo el valor del sueño. Pensaba en dormir pero creía “esta vida es breve”, quiero decir, la vida en la habitación que es respirable la noche entera. Una puerta que existe, un cobertor que se cubre de insospechada importancia. Todo es respirable, también el aire. El gesto que viene, saber que lo sabía venir, su boca también respirada y la ventana que mira a ventanas afuera. El cuarto son sus cosas, las cosas que lo tocaron, la sensación de él. Fuera de su cuarto puedo dormir, pero sólo respiro ecos de corredor, barracas del aire de esa casa.

5 comments:

  1. Salen de mi cabeza las palabras y los buscan en su edificio. No los conozco pero los pienso. Quiero ver así no tenga ojos en el asunto. Me gusta entender ( o imaginar?). Soy hombre, qué hago, mi piel es curiosa y siempre me ha preguntado por los mundos de Venus construyendo su espacio y esculpiendo sus emociones en letras de momento y aire. Yo guardo ecos en mis jardines también. Flores blancas y amarillas.

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  3. Una vez entré al cuarto de él, en su casa vacía, cuando estaba muchos sueños de distancia y sentí su presencia entre sus libros, en las hojas de apuntes que tenía en la mesa, en la flor seca del florero, en la esencia sutil del aire, en la veranera asomada a su ventana...

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  4. Desposeida de cualquier signo se hace imagen suelta, flotante.

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  5. Yo había escuchado las cosas ciertas de respirar bajo los cuartos. Pero no las había podido ver. Ud "hace" ver. Gracias.

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